¿Qué pasa en terapia?

¿Te da curiosidad saber cómo sería consultar a un profesional de la salud mental? A continuación, te damos las respuestas a algunas de las preguntas más comunes.

Mientras lees, pregúntate: ¿en qué se diferencia hablar con un terapeuta de hablar con un amigo o un padre?

Todos tenemos emociones intensas de vez en cuando. Es parte de lo que nos hace humanos. Hablar de estos sentimientos con amigos, familiares y maestros puede ayudarnos mucho. Pero a veces necesitas a alguien entrenado específicamente para ayudar a la gente a resolver sus problemas; es decir, necesitas un terapeuta.

Tal vez creas que la terapia es solamente para adultos. O quizá creas que para que la terapia valga la pena necesitas estar lidiando con un gran trauma o con una enfermedad mental seria. Pero, en realidad, la terapia puede ayudar a cualquiera que quiera entenderse mejor a sí mismo y a sus sentimientos. Eso incluye a los adolescentes: según la Alianza Nacional de Salud Mental, el 28 % de los adolescentes de los Estados Unidos ha recibido algún tipo de tratamiento para la salud mental, como la terapia.

La Dra. Gauri Khurana es psiquiatra que se especializa en tratar adolescentes. Explica que “no estás loco si haces terapia. No hay ningún problema contigo. De hecho, creo que algunas de las personas más centradas son las que hacen terapia y examinan cómo sus actos las afectan a ellas mismas y a los demás”.

Les pedimos a algunos expertos que respondieran a las preguntas más comunes acerca de la terapia, entre ellas cómo empezar si quieres probar.

1. ¿Cómo funciona la terapia?

La terapia es una conversación entre un profesional de la salud mental entrenado y tú. Esta conversación puede ocurrir en persona en el consultorio del terapeuta o a través de una videollamada.

Por lo general, en tu primera sesión tu terapeuta te hará preguntas sobre tu vida, sobre cómo te has estado sintiendo y sobre lo que buscas lograr con la terapia. Esto es para que pueda empezar a entenderte y a pensar en maneras de ayudarte. Es también tu oportunidad de hacer cualquier pregunta que tengas sobre cómo trabajarán juntos.

Después de esa primera sesión, las conversaciones seguramente sean menos estructuradas. ¡Puedes hablar de lo que quieras! Aprovecharás más tu terapia si eres lo más honesto posible. Esto tal vez te asuste al principio, pero es importante que tu terapeuta conozca al verdadero tú. “La terapia es una colaboración —explica Emily Reading Bianco, consejera estudiantil en Nueva York—. Tu terapeuta es un experto en salud mental, ¡y tú eres un experto en ti! Tú y tu terapeuta trabajan juntos durante un período de tiempo para descubrir qué te ayudará”.

2. ¿Cómo encuentro un terapeuta?

Un gran primer paso es decirle a uno de tus padres, a tu consejero estudiantil o a tu pediatra que te gustaría hacer terapia. Tu consejero o tu pediatra tal vez tengan listas de terapeutas que se especializan en la adolescencia.

Si quieres buscar por tu cuenta, usa la función de búsqueda en los sitios web de la Asociación Psicológica Americana (locator.apa.org) o de Psychology Today (psychologytoday.com). Puedes filtrar tu búsqueda para encontrar terapeutas que trabajen con adolescentes. La mayoría de los terapeutas conversarán contigo brevemente por teléfono para asegurarse de que puedan trabajar bien juntos antes de programar tu primera sesión. No tiene nada de malo hablar con varios terapeutas antes de elegir uno que te parezca el correcto.

3. ¿Me voy a sentir mejor enseguida?

La terapia no va a cambiar las cosas de un día para otro. ¡Y no debería hacerlo! La Dra. Khurana dice: “En las películas y en las series tal vez veamos que un personaje asiste a una sola sesión de terapia y todo se soluciona. Pero en la vida real, los buenos cambios ocurren muy despacio. Intenta ser paciente”.

Hay gente que hace terapia durante un tiempo, y luego la deja cuando siente que tiene las herramientas suficientes para lidiar con sus problemas por su cuenta. Otras personas hacen terapia durante años. Y, a veces, la gente hace terapia, la suspende por un tiempo, y luego la retoma con el mismo terapeuta o con otro.

4. ¿Cuánto cuesta la terapia?

Depende. Los diferentes tipos de terapeutas tienen diferentes tarifas. Algunos usan escalas móviles, que significa que pagarás lo que puedas. Tu familia quizá pueda pagar parte o el total de tu terapia a través del seguro médico. Si tu familia tiene seguro médico, pídele a un adulto que te ayude a encontrar a un terapeuta que acepte ese seguro.

También existen opciones que son gratis o de bajo costo. Por ejemplo, tal vez puedas programar citas regulares con el consejero, psicólogo o trabajador social de tu escuela. Hay muchas regiones que también cuentan con grupos de apoyo o grupos de terapia para adolescentes que son gratis. Pídele a tu médico o a tu consejero estudiantil que te ayude a encontrar un grupo.

5. ¿Mi terapeuta les va a contar a mis padres y maestros lo que digo?

La respuesta corta es “no”. Lo que digas en tu sesión de terapia es confidencial. Tu terapeuta sólo compartirá con otras personas lo que ustedes dos platiquen si le preocupa que te hagas daño o que lastimes a alguien, o si alguien te está lastimando a ti. Lo hará para asegurarse de que tanto tú como quienes te rodean estén seguros.

Pero si necesitas hablar de otros sentimientos, incluso de sentimientos que tal vez creas vergonzosos, mezquinos o extraños, tu terapeuta va a escucharte y no le va a contar a nadie. Quizá te dé algún consejo si se lo pides, pero jamás te juzgará por nada de lo que digas, ni te dirá que estás equivocado por sentir lo que sientes.

Tus sesiones con tu terapeuta, ya sean en persona o en línea, deberían ser un espacio seguro en el que puedes decir lo que quieras.

6. ¿Todos los terapeutas son iguales?

No. Terapeuta es un término general que abarca a diferentes tipos de profesionales de la salud mental. Estos son algunos de los tipos más comunes:

  • Un psiquiatra tiene un título médico (M.D. o D.O., según sus siglas en inglés). Puede diagnosticar y tratar afecciones de salud mental como la depresión y la ansiedad. Si tienes una afección que requiere medicación, seguramente necesites ver a un psiquiatra para que te recete la medicación.
  • Un psicólogo tiene un título de doctorado (Ph.D., según su sigla en inglés). Puede diagnosticar y tratar problemas de salud mental, pero no puede recetar medicamentos.
  • Un terapeuta, consejero o trabajador social tiene una maestría. Puede ayudarte con problemas de salud mental pero no puede recetar medicamentos.

CONSIGNA PARA REFLEXIONAR: La Dra. Khurana dice que, en la vida real, los buenos cambios suceden lentamente. ¿Estás de acuerdo? Escribe un párrafo que explique tu opinión, e incluye ejemplos de tus propias experiencias.