¿Alguna vez te has encontrado quitándote copos blancos de los hombros? Esto podría significar que tienes caspa.
La caspa puede estar causada por un tipo de levadura que se encuentra en la piel o por glándulas sebáceas hiperactivas. Es más común en la adolescencia, cuando los altos niveles hormonales pueden provocar un exceso de producción de sebo. El clima frío y seco del invierno y el estrés también pueden empeorar la caspa.
Aunque la caspa puede ser vergonzosa, la buena noticia es que no es contagiosa y se puede tratar fácilmente. Busca un champú que contenga uno de los siguientes ingredientes activos: sulfuro de selenio al 1%, piritionato de zinc, alquitrán o ketoconazol.
Si la caspa no mejora después de 4 a 6 semanas, prueba de cambiar a un champú con un ingrediente activo diferente.
Si los champús no funcionan, o si tienes zonas rojas, con costras o en carne viva en el cuero cabelludo, díselo a un adulto y pide cita con un dermatólogo.